BiBLiOTeCA EsCoLaR · ReFLeXioNeS

ilustración de Steva Radivoeva

Ahora que va acabando el año y por inercia nos abocamos a reflexiones y balances, ahora también que profesionalmente y personalmente estoy metida en cambios creo necesario añadir un balance de la labor de la Biblioteca Escolar del cole, CEIP Ferrández Cruz.
Balance necesario para decidir el futuro.

Quienes trabajamos en bibliotecas escolares sabemos de la necesidad de las mismas en el entramado de la Educación y en algunos casos del abandono administrativo en el que se ven. Las leyes escriben estas dos palabras con letra pequeña, biblioteca escolar, las meten en algunos objetivos generales, en un par de estándares de aprendizaje por área, añaden un plan lector y hala... ahí te quedas.
Apáñate.

En la Comunidad Valenciana, lugar en el que trabajo, no hay nada que acoja la labor de los responsables de la biblioteca, ni para bien, ni para mal. Así que toda faena que se realiza sea grande o pequeña es voluntaria y entra dentro de la suerte que tengas: de encontrarte un equipo directivo que lo vea claro y/o de tener compañeros que hagan equipo.

Desde esta perspectiva quiero recopilar la estructura de nuestra pequeña biblioteca en nuestro centro, también pequeño.

El equipo de responsables de nuestra biblioteca va cambiando cada curso y en los inicios de curso siempre se ofrece a los integrantes del Claustro la posibililidad de pertenecer al mismo.

Nuestro trabajo se inicia en octubre con la Formación de Usuario a los cursos superiores de Primaria, en la que descubren el funcionamiento de la biblioteca, el significado de los colores de los tejuelos y el  de la signatura de cada libro. Juegan e ilustran cubiertas, inventan argumentos y tejuelos... y entre ellos surgen los pequeños bibliotecarios que ayudarán en la faena de ordenar los libros del préstamo.

De noviembre a mayo cada curso se elige un tema que será el eje central de las actividades que cada semana se realizan en la biblioteca del centro: la poesía, el miedo, los medios de comunicación, el abecedario, los atlas, los mapas y viajes han sido algunos de nuestros temas. Cada nivel es retado a descubrir su talento normalmente de creación escrita y a descubrir lecturas sobre el tema que se está trabajando. Todos los lunes de cada curso la biblioteca recibe a una clase del cole o la biblioteca visita una clase.

En mayo, ya acabándose el curso se convoca a todo el alumnado a participar en el Concurso Literario Escolar que siempre versa sobre el tema que ha envuelto durante el curso nuestra biblioteca. El acto de entrega de diplomas y premios se ha convertido en la manera de despedir el curso y dar la bienvenida a las vacaciones de verano.

La biblioteca escolar puedo asegurar que es  el eje vertebrador no solo de animación lectora como por ejemplo con las fotolecturas (recomendaciones lectoras) o las lecturas viajeras (responsables de la biblioteca leyendo por las clases)  sino en el elemento tejedor de redes emocionales entre los miembros de la Comunidad Educativa de manera tan sencilla como eligiendo el jurado para la elección de los ganadores del Concurso Literario entre familias y profesoradoo a través de la actividad del Padrino Lector leyendo o escribiendo la carta a los Reyes Magos o escribiendo alguna carta de urgencia al Ratoncito Pérez.

Mantenemos a lo largo del curso actividades lectoras que repetimos curso tras curso como la lectura a los peques más mayores de E. Infantil cuando ya tiene cinco años del álbum Mola tener cinco años o las  lecturas a los pequeños con sorpresa. Realizamos otras actividades esporádicas  como grabaciones de booktrilers, concursos de letras de canciones, recreación de libros, exposiciones, cuentacuentos y visitas de artistas y/o escritores... Y muchas más que quedan en el tintero y podéis encontrar recorriendo el blog de nuestra biblioteca 

quetendralaprincesa.blogspot,com.es

Blog que además de recoger las actividades de la biblioteca, también muestra algunos de los trabajos que se hacen en las tutorías relacionadas con competencias escolares, hacemos recomendaciones lectoras o se muestran curiosidades con libros, letras, se proponen actividades... siendo además un canal muy activo que muestra a la Comunidad Educativa todo lo relacionado con nuestra labor.

Como además nos preocupa la calidad de las lecturas de nuestros alumnos diseñamos y proponemos dos veces al curso Guías de Lectura que todo el alumnado del centro realiza y lleva a casa: guías de lectura de navidad con blondas, guías de lectura de navidad dulces, guías de lectura de navidad con árboles  refrescantes guías de lectura de verano, guías de lectura hechas peces o guías de lectura hechas postal. Siempre diferentes y llenas de recomendaciones interesantes.

Mientras tanto vamos decorando a lo largo del curso la entrada de nuestra biblioteca con motivos de las lecturas que se exponen, esta es una de las que más triunfó. 

No olvido el préstamo de libros tanto individual como para las bibliotecas de aula, labor primigenia que se supone a la biblioteca pero que en nuestro caso queda en anecdóticos al lado del resto de actividades. 

 Así, sucintamente es nuestra labor año tras año. Ya  va para, creo recordar, nueve cursos.

La pregunta que me atenaza desde hace un tiempo es si merece la pena el tiempo extra que supone todas y cada una de las actividades, la gratuidad de esta dedicación, los quebraderos de cabeza que supone cada una de las ideas, la soledad que a veces atenaza cuando los horarios no ayudan a la coordinación entre el equipo, los disgustos, los desencuentros, la idea de que esto es cosa tuya y no va con el resto. Ya no me vale con la satisfacción personal. ¿Qué hacer cuando ya no estás satisfecho? ¿Para cuándo el reconocimiento de la labor que se hace con los blogs educativos? ¿Por qué cada actividad, aunque sea plagada de éxito, supone un sobreesfuerzo?

Ninguna de las ideas y/o actividades que surge del equipo de biblioteca ha sido frenada por el equipo directivo del centro, todo lo contrario y el Claustro sigue siempre con más o menos entusiasmo las propuestas del equipo de la biblioteca. Que no es poco, lo sé. Ya no es suficiente. Así lo siento. La certeza del abandono por parte de las administraciones que recorta material humano y económico mina el espíritu aventurero con el que inicié el liderazgo de esta labor ardua y tan importante. Y el cansancio. Y la soledad. En ocasiones, la hartura.

Conseguir que la biblioteca se convierta en un verdadero CREA (Centro de Recursos para la Enseñanza y el Aprendizaje) requiere de algo más que buenas voluntades por parte de los trabajadores de la enseñanza. La necesidad de la creación de la figura del bibliotecario escolar es apremiante. Sin un organigrama claro con responsabilidades, derechos y deberes del mismo acabamos siendo especies a extinguir. No sirven los documentos, leyes y decretos con las letras vacuas e inútiles si a estas alturas del cuento el Lobo se va tragando a Caperucita.

Espero impaciente al Leñador que me rescate de la barriga.