CaLCeTíN

Escultura de Antoni Tàpies

Llevo un calcetín

con un agujero

y no sabes cuánto,

cuánto lo agradezco,

pues tengo algún dedo

que es un protestón

y me dice a diario

que quiere un balcón.

- Pues ahora asómate,

cada vez que quieras,

que le pedí a mami

que no lo cosiera.

(Menos mal que sólo

usamos dos pies…

¡Cuántos caprichosos

habrá en un ciempiés…!)

Acabo de descubrir a este poeta, Aurelio González Ovies en su blog sembrado de su obra poética, y me ha subyugado.

Nunca podré agradecer bastante la aparición de internet en mi vida que me ha acercado al mundo. Y no es que estuviera alejada de él, del mundo quiero decir, pero solo me puedo permitir comprar un periódico y ahora puedo leer los que quiera, conocía a un círculo cercano de personas y ahora tengo relación con personas que viven en diversos puntos del planeta, me resistía a dejar mi máquina de escribir y hoy soy "la experta" en ordenadores, me siento poderosa con el mundo en esta ventana, delante de mis ojos. Y no dejo de descubrir, día a día espacios nuevos, con personas detrás de ellos. Que es lo más  interesante, las personas que habitan este mundo y que aportan la sensibilidad que necesitamos. Por lo menos ahora con estos medios internautas, podemos acercarnos y descubrirnos. Y el descubrimiento de hoy ha sido este poeta asturiano, profesor de lenguas clásicas que se ha aventurado en la poesía infantil. Y he querido dejar una muestra. A los niños seguro que les  encanta.