No SoY PeRFeCTA

"No soy perfecta" de Jimmy Liao en la editorial Barbara Fiore Editora 

Este libro, según indica la dedicatoria del autor está dirigido a los niños y adultos que han dejado de buscar un mundo perfecto.

Protagonizado por Perfecta Nueno, una niña de Tercero que tiene que sufrir su nombre al que piensa renunciar en cuanto tenga dieciocho años, pero que dicha circunstancia le hace reflexionar sobre las perfecciones, los perfectos, los imperfectos, lo humano y lo divino.

Intercalado entre sus reflexiones se encuentran personajes históricos considerados como genios que no eran perfectos como personas y que hicieron alguna reflexión al respecto: Salvador Dalí "No temas la perfección, nunca la alcanzarás", Paul Cezanne "Vivimos en un arco iris de caos.", William Shakespeare:  "Esforzándonos por alcanzar lo mejor, a menudo estropeamos lo bueno.",  George Bernard Shaw " Si no hubiera nada malo en el mundo, no tendríamos nada que hacer.", William Somerset Maugham " La perfección tiene un grave defecto: suele ser aburrida."

Acabando el libro hay un pequeño anexo con unas pequeñas notas sobre personas que no eran perfectas, pero sí geniales. Leonardo da Vinci, Galileo Galilei, Amadeus Mozart, Beethoven, Hans Chhristian Andersen, Abraham Lincoln, Charles Dickens y Florence Nightingale, Fukuzawa Yukichi, Claude Monet, Helen Keller, Isadora Ducan, Antoni Gudí, Mrie Curie, Hermanos Wright y Thomas Edison. Si investigáramos en profundidad sobre cualquier persona ilustre descubriríamos que no son ni eran perfectas. ¡Qué alivio!

Perfecta va haciendo sus propias reflexiones a partir de alguna idea. Son reflexiones maduras que hacen sonreír al adulto pero que dejan un runrún en la cabeza.

  "Este es un primer plano perfecto.

Me llamo Perfecta Nueno y voy a tercero de Primaria, pero mis estúpisos compañeros me llaman, con mala idea, Defecto Bueno y Defeca Trueno.
Cuando fui llorando a contarle a la maestra que me habían puesto unos motes muy feos, por mucho que la maestra los regañó no sirvió de nada.
Hoy en día, ¿quién le hace caso a la maestra?

Los motes perfectos hacen que la gente se sienta bien.

Los odio a muerte a todos. A la abobinable foca Huang, al cerdo asqueroso de Guo, al miserable de Wang, a la mierdecilla de Lili, a la cursi de Lea, al paleto de Liu, a la cabezona de Ma, al sapo con gafas, al dientes rotos Peng, cizañeros, carilargos, fantasmas de tofu. Y al mocoso de Zhu, sin olvidarnos del mierda apestosa de Ling. Habéis logrado que me acuerde de todos vosotros."

  "Los prejuicios inevitablemente llevan a la arrogancia.

A menudo me pregunto por qué al niño al que le gusta  estar solo lo consideran un bicho raro; al niño al que le gusta decir lo que piensa lo llaman provocador; al niño al que le gusta esconderse en un rincón lo tachan de antisocial; al niño al que le gusta ocupar el centro del escenario lo acusan de ser figurón. Los mayores suelen quejarse de los dolores de cabeza que les causan los niños, pero quizá no se da cuenta de los dolores de cabeza que también ellos causan a los niños."

128 páginas con mucha enjundia. Sin desperdicio.
Ideal como regalo para aquella persona a la que quieres mucho y quiere rayar la perfección, y se ahoga con las dificultades y además piensa que es un desastre...

Todos conocemos algún elemento así.

No es apto como regalo para quien se cree perfecto, pues se va a molestar.

"La piel perfecta envejece con el paso del tiempo.

¿Fuiste a nadar en  verano?
¿Hiciste braza, crol y espalda?
En el agua fría, me siento como un pez alegre.
Tendida junto a la piscina, mirando pasar las nubes, soy feliz.
También soy feliz cuando el sol me tuesta la piel.
¿Te has bronceado? La gente que no teme al sol es feliz..."

Abres el libro, por cualquier página y sabiendo la filosofía del asunto, disfrutas de cada una de las reflexiones.

Por último para sentenciar:

"Los mayores perfectos son niños.

Los mayores se quejan de lo pobres que son, pero luego se van de tiendas.
Los mayores se pasan el día quejándose del poco tiempo del que disponen, pero luego lo malgastan mirando la tele.
Los mayores suelen estar muy cansados, pero luego desperdician sus energías enfadándose con el gobierno.
Los mayores siempre quieren controlar a los niños, pero nunca se controlan a sí mismos.

Si alguna vez me hago mayor, desde luego no seré como ellos.
Yo, en su lugar, no sería mayor."

Regálatelo. Merece la pena.

Comentarios

Lady Sterling ha dicho que…
¡Qué pinta más buena tiene!.
Ahora tendría que hacer otro el autor sobre Angustias.
Mira que hay nombres que marcan.